by Dale F. Simpson Jr. – Arqueólogo
University of Queensland, School of Social Science (Archaeology); College of DuPage (Anthropology);
Manu Iri Heritage Guardians; Ka’Ara Environmental Conscience.
En las fases iniciales de mi investigación de campo para mi Ph.D. sobre Rapa Nui y sus antiguas fuentes, canteras, talleres líticos y artefactos de basalto, he presentado a los prehistóricos Rapanui como ancestrales geólogos y mineros prolíficos, que desarrollaron múltiples procesos reductivos para crear herramientas de basalto de grano fino y otros rasgos característicos de piedras en 5 áreas: Pu Tokitoki, Ava o’ Kiri, Rano Kau, Vai Atare, y las minas de la costa sur encontradas entre Hanga Poukura y Hanga Hahave (Moe Varua, mayo 2015). He sugerido que la demarcación de canteras de basalto de grano fino con petroglifos del dios Make-Make con sus ojos resaltantes, fue un intento por parte de la elite de vigilar y controlar los recursos importantes de basalto y limitar su acceso y uso. Desde ese reporte inicial, he continuado con la investigación y he llegado a la conclusión preliminar sobre una interacción sociopolítica de la cultura prehistórica Rapanui.
Mi investigación está basada en el hecho de que cada flujo de lava en Rapa Nui es como un dedo, con su propio ADN y su autógrafo específico, por lo tanto, cada artefacto hecho en una cantera específica puede ser identificada con la huella digital única del mismo flujo. De ahí en adelante podemos trazar el movimiento del material – desde fuentes geológicas a sitios arqueológicos – identificando si ciertos grupos sociales utilizaban determinadas piedras, controlando ciertas canteras, y/o extrayendo material específico para determinadas herramientas. Con esta información podemos evaluar y corroborar y/o desaprobar interpretaciones previas sobre la organización sociopolítica y territorialidad prehistórica. Los resultados geoquímicos sugieren que:
1) Los recursos de basalto del Rano Kau y Vai Atare eran rara vez usados para la manufactura de herramientas. En cambio las canteras de piedras de este área se utilizaron para extraer keho(piedras laja) destinadas para la construcción de las casas de Orongo. También el basalto encontrado en la región Vai Atareusado para la fabricación de pequeñas herramientas, no provenía del lugar, sino de las canteras de la costa Sur.
2)Aún existen canteras y fuentes de basalto que no hemos localizado.Ello indica que mientras gran parte del paisaje megalítico de Rapa Nui se ha estudiado, hay otro tanto de la herencia arqueológica de la isla que permanece en el misterio, en especial lo relativo a la cultura del material basáltico donde urgen futuras investigaciones.
3) Pu Tokitoki y las minas de la costa Sur entre Hanga Poukura y Hanga Hahavefueron dos de los más importantes centros para herramientas de basalto de grano fino en Rapa Nui. A su vez muestran patrones únicos de su uso prehistórico. Por ejemplo, nuestra evidencia indica que los clanes que residían en Anakena y Tongarikidependían de las numerosas fuentes y canteras de las regiones de Pu Tokitokiy Ava o’Kiri. Sin embargo, el clan Miru, el más importante, concentrado en Hanga Rau (‘Anakena – Ahu Nau Nau), también tenía en su poder materiales que fueron extraídos de las minas de la costa Sur. Ello sugiere que los Miru tenían acceso a los dos mejores recursos basálticos puros en Rapa Nui. De lo contrario, los clanes del Este y Oeste dependían en gran medida de las minas de la costa Sur para surtirse de basalto como materia prima. Aquellos clanes de Tahaitambién tenían acceso a Pu Tokitoki.Estos patrones ilustran movimientos de piedras entre los diferentes mata kaingao territorios de los clanes y también entre las dos confederaciones, los Ko Tu’u Aro Ko Te Mati Nui,clanes del Norte de mayor posición social y los Ko Tu’u Hotu Iti Ko Te Mata Iti,clanes del Sur de menor posición social.
La conclusión preliminar es que la adquisición, el uso y el depósito arqueológico sigue patrones de control de la elite; con las dos fuentes del mejor basalto de la isla usados por los miembros de elite de la cultura prehistórica de Rapa Nui (asociada al complejo ahu-moai). Este modelo de control de la elite sobre los recursos ha sido muy documentado por décadas, en especial con miras hacia recursos líticos.Por ejemplo, estudios sugieren que la obsidiana de 4 canteras fue diferencialmente utilizada en base a su calidad vítrea y locación geológica. Ello incluye como materiales deseables que fluían en la economía sociopolítica y fueron preferentemente retenidos por miembros de la elite en su proceso, mientras aquellos de menor rango obtenían estas piedras vía un intercambio bajo la línea. La elite Rapanui (ariki– jefes ytangata honui – hombres importantes) monitoriaban y controlaban el flujo de obsidiana de alta calidad de Orito y Motu Iti,usando esta obsidiana superior en los centros ceremoniales(ahu y moai) de la franja costera isleña y alrededor de loshare paengao construcciones de casas de la elite. Mientras tanto, obsidiana de menor grado del Rano Kaufue distribuida a través de redes familiares en las áreas más al interior de la isla, donde vivían los campesinos que trabajaban en forma corporativa para producir los artículos para la subsistencia como para las construcciones monumentales costeras.
Una pregunta, sin embargo, queda pendiente. ¿Quémecanismosocial, político y económico facilitó estos movimientos del basalto? ¿Fue un tipo de intercambio que promueve un trueque entre las elites, y donde cada clan producía los recursos que su territorio permitía? Algunos intercambios son, por ejemplo, cosechas hortícolas por piedras, plantas y animales por piedras y/o personas e información por piedras. ¿Era éste un sistema de comercio entre clanes y aún dentro de un mismo territorio? Estas preguntas son las que aún nos interesan sobremanera, y en nuestros futuros análisis y publicaciones nos ayudarán a ilustrar la complejidad de un sistema económico sociopolítico de la prehistórica cultura Rapanui. (“Rapa Nui Geochemical Project” – Twitter & Facebook: @RNgeochemPHD).